by Tradicionalmente la tienda de aplicaciones de Google ha sido relativamente accesible. Cualquier desarrollador puede enviar una nueva aplicación y verla publicada al cabo de unas horas, siempre y cuando los sistemas automáticos de Google no hubieran detectado algún problema en su código. Ahora Google avisa de que se tomará más en serio la revisión de nuevas aplicaciones, en casos concretos.
Este cambio ha sido puesto en evidencia por Choice of Games, un desarrollador con decenas de juegos publicados en Google Play y que, al intentar publicar una nueva aplicación recibió un banner de aviso: su aplicación se revisará más a fondo. Google explica en la página de soporte que el proceso puede tardar hasta tres días.
Solo en algunos casos
No, Google no ha decidido cambiar radicalmente la política sobre la publicación en Google Play, sino que al parecer solo aplicará esta revisión en profundidad a las nuevas aplicaciones de algunas cuentas de desarrollador. Este es el texto exacto:
En algunas cuentas de desarrollador, dedicamos más tiempo a revisar con cuidado las aplicaciones para proteger a nuestros usuarios. Recibirás una notificación en el Panel de control de tu aplicación sobre el tiempo que deberíamos tardar. Pueden pasar hasta tres días desde que envíes tu aplicación hasta que se publique, así que te recomendamos que lo tengas en cuenta y ajustes la planificación.
Este tiempo adicional puede retrasarse hasta tres días, de modo que Google avisa a los desarrolladores para que lo tengan en cuenta si tienen previsto el lanzamiento en un día previsto. En dicho caso, el modo correcto de evitar un retraso es lanzar la aplicación primero y con tiempo en el canal alfa, para después de recibir el visto bueno poder programar la publicación normal.
El motivo que Google esgrime para este cambio es proteger a los usarios, lo cual está relacionado con informes frecuentes sobre malware o apps de muy mala calidad que terminan colándose en Google Play. En principio debería ser una buena medida para los usuarios, aunque quizá algo frustrante para los desarrolladores, que deberán esperar un poco más antes de tener su aplicación visible.
