Es sábado por la mañana y hace un día fantástico que cualquier fan del calor veraniego sabría apreciar. Yo no me calificaría como simpatizante de ese grupo, pero pese a ello me dispongo a salir a la calle para ir persiguiendo sombras y posadas junto a mis dos hijos. La ocasión, pese al irritante bochorno, lo merece. Vamos a probar ‘Harry Potter: Wizards Unite’.
Siguiendo la estela del éxito de ‘Pokémon GO’, los creadores del ya mítico juego para móviles pretenden cosechar la misma atención -e ingresos- con una nueva aventura de realidad aumentada, esta vez centrada en el universo de magos de J.K. Rowling.
De ‘Pokémon GO’ a ‘Harry Potter: Wizards Unite’
La premisa de ‘Harry Potter: Wizards Unite’ es muy similar a la vivida en la colaboración con Nintendo. Esto, en esencia, va de pasear por la calle en busca de eventos aleatorios que nos permitirán aumentar nuestra colección. La diferencia es que si en uno coleccionábamos Pokémon, en este tocará recopilar una suerte de pegatinas.
Basadas en las distintas entregas de la franquicia, nos cruzaremos con la versión digital de los personajes de las películas, objetos mágicos aparecidos en los libros o bestias sacadas del imaginario de Rowling en el libro Animales fantásticos y dónde encontrarlos.
Cada vez que nos crucemos con uno de estos coleccionables tocará, en modo realidad aumentada o sin hacer uso de esa tecnología, realizar un hechizo para capturarlos. Un estudiante atrapado en hielo, una bestia en llamas, un tornado que lleva de aquí para allá un cartel de Se Busca… Cada uno de ellos deberá ser liberado realizando con el dedo un dibujo sobre la pantalla que simularía el baile de la varita al invocar el hechizo.
Sí, probablemente no seas el único en pensar que la solución está lejos de ser la ideal y que algo más de interacción habría venido de perlas -¿sensor de movimiento, tal vez?, pero no descartemos la opción de ver varitas Bluetooth si el juego acaba cogiendo tracción.
Dependiendo de la velocidad, la limpieza de la trazada y nuestro nivel como mago, la probabilidad de conseguir el coleccionable en cuestión será más o menos alta. Así, aunque la mayoría de objetos son de fácil adquisición, puede que nos encontremos con alguno que nos invita a ir en su búsqueda más adelante o utilizar pociones que aumenten la probabilidad de captura.Es un juego muy similar a ‘Pokémon GO’, pero aporta lo necesario para que la copia no cante demasiado.
En ese último apartado radica la monetización de este ‘Harry Potter: Wizards Unite’. Las ayudas que, a golpe de billetera, nos permitirán aumentar nuestras colecciones con mayor facilidad o evitar tener que ir de posada en posada buscando la energía necesaria para realizar los hechizos. Lo que se podría resumir en un ahorro de tiempo invertido en el juego, ya sea en forma de capturas o de pasos, y que serían el equivalente a las bayas y las pokéball de ‘Pokémon GO’.
Misma fórmula, mejor juego
El resultado es un juego que se siente muy similar a la fórmula ya mundialmente conocida, pero que aporta el toque necesario para que no cante demasiado el salto 1/1 que supone la propuesta. Con la excusa de una serie de fragmentos diseminados por el mundo por culpa de un mal llamado Calamidad, nuestro papel será convertirnos en uno de los magos que ayudará a combatir el problema junto a Hermione, Harry y compañía.
Es, por así decirlo, una nueva historia basada en el universo de Potter en la que, a golpe de misiones, iremos avanzando en una trama que sirve más como excusa que como motor para generar interés. A que lo tomemos con algo más de filosofía no ayuda el acoso al que nos vemos sometidos, especialmente durante los primeros compases, con conversaciones que deberían servir para ponernos en situación pero que se hacen terriblemente pesadas.
Contentos o no con el guión o el formato, que sirve para traer de vuelta viejos personajes a una época post Voldemort con fragmentos de recuerdos como justificación, se agradece que ‘Harry Potter: Wizards Unite’ llegue ya en buena forma y no como juego que irá completándose con el paso de los meses.